Es, ante todo, una raza de canarios de canto, es decir, que seleccionamos nuestros canarios en función de sus facultades canoras sin considerar aspectos como el color, tamaño o forma. Es la raza más directamente vinculada con el canario silvestre de las Islas Canarias, Azores y Madeira. Intentamos conseguir que nuestros pájaros se mantengan cerca del modelo de canto del canario silvestre, potenciando sus innatas facultades y tratando de eliminar sus defectos. Esta cercanía con el canario silvestre condiciona la apariencia de nuestros ejemplares, de tamaño menor que otras razas y forma similar al de sus ancestros salvajes. También su plumaje, generalmente verde o manchado de verde y amarillo, aunque es posible encontrar timbrados completamente amarillos, grises, blancos y canelas (brunos). Otros colores y, en especial, tonos rojizos indican cruces con variedades de color lo que produce su descalificación en concursos.
El canario fue domesticado por su llamativo canto y desde el principio surgieron criadores españoles que se dedicaron a cultivarlo. A buen seguro aquellos primeros canarios criados en cautividad tenían un canto muy cercano a algunas líneas del actual Timbrado. Pese a esto el Timbrado fue la última raza de canto oficialmente reconocida por la Confederación Ornitológica Mundial, en 1962. Por esto se puede afirmar que el Timbrado es, a la vez, la más antigua y moderna de las razas de canto.
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